Fecha
- From: 23 octubre, 2018
- To: 23 octubre, 2018
- Starting at: 03:30 PM
- Finishing at: 06:30 PM
“Para nuestra sorpresa y molestia, encontramos que, el 15 de noviembre, un evento reunirá en parís a diez autores colombianos, citando después los nombres de diez hombres. Es intolerable que todavía en Colombia se hagan eventos que no incluyan mejores”, decía una de las líneas del texto que guiaba la lectura dramática con la que abrió el Coloquio ERRATA#17, feminismos, titulada “En (vi) cita. Una lectura dramática del trabajo de las mujeres en el campo del arte”, a cargo de Mónica Eraso, Ana Karina Moreno y Ana María Villate. Este evento académico fue realizado este martes 23 de octubre en la Cámara de Comercio de Bogotá, por el Idartes, la Revista ERRATA y Artbo.
Tres mujeres, con las pañoletas verdes que representan la lucha por la aprobación del aborto en Argentina puesta estas en sus cuellos, se alternaban cuatro asientos, cuatro sillas, una de ellas marcada con el nombre de “artista”. Cuando se sentaban en ese lugar “privilegiado”, recitaban situaciones que dejaban ver cómo la mujer y su labor en el arte ha carecido de respeto, de importancia y ha sufrido, en muchos casos, agravios.
Esto relacionado con el tema del Coloquio, cuyo título, “No hay doctorado que te salve del patriarcado”, fue calificado por la moderadora, Diana Ojeda, como “muy poderoso, porque apunta a las mentiras de un sistema que se promueve como meritocrático, en el que el sistema es realmente más complicado”.
Y así fue, la palabra la tomó Victoria García en nombre del Colectivo Trabajadoras de Ciencia y Universidad, después de la lectura dramática del trío de investigadoras, quien llegó de Argentina para plantear una reflexión sobre la lucha de derechos en su territorio, haciendo un viaje por la historia de luchas e intentos de transformación de organizaciones sociales, académicos, artistas y gestores en la tierra tanguera.
“Quiero comenzar con el caso de Domingo Cavallo, responsable de la calamidad social y económica que vivimos en los años 90, en un enfrentamiento con Susana Torrado, científica, quien demostraba en el 94 que los índices de desocupación que alcanzaba el país eran mucho mayores que lo que estaba comunicado el gobierno. Cavallo, en un ataque, le dice que se vaya a ‘lavar los platos’, queriendo reducirla al ámbito privado y domestico que las mujeres tenemos a cargo en esta sociedad patriarcal”.
Ella se refirió a temas trascendentales, evidenciando que las desigualdades de género afectan el libre desarrollo de las mujeres, así como su acceso al derecho al trabajo y el derecho a la educación.
Llegó entonces el panel. En el que las cuatro ponentes se sentaron a conversar con la moderadora de los escenarios de búsqueda de posicionamiento de la labor de la mujer en el arte y de la mujer, en general, en otros escenarios.
“A veces lo que se hace es cerrar un poco los espacios. En mi trabajo, la mayoría somos docentes, sin embargo, quienes movilizan los temas son las estudiantes y cuando lo han hecho no hemos tenido respuesta. Siendo la mayoría mujeres, mujer y feminista no es lo mismo. Lo que se logra es más bien tener el eco de compañeras de otras facultades”, precisó Ana María Villate, dando apertura a un diálogo del curso que ha tomado luchar por causas feministas en el ámbito académico.
A su vez, Victoria García apuntó que “la reconfiguración tiene que ver con cómo la ola feminista no cabe en las instituciones y cómo las salidas ante esto son a veces inesperadas”.
“La tarea es que se abran posibilidades para que no se sigan perpetuando esas maneras y esas organizaciones que no abren un debate serio sobre el género”, dijo Mónica Eraso.
¿Cómo pensar las artes sin género?, fue la pregunta que comenzó la ronda final de preguntas del público, la cual Diana Ojeda atendió diciendo que “no se pueden pensar sin género” y que no debe seguir mutando esa idea en la producción, la difusión y la investigación, así como en la vida diaria.
Coloquio ERRATA#18
“Los derechos de los vivientes”, así se denominó el Coloquio ERRATA#18. La sesión, que inició luego de las 3:30 p.m. de este martes 23 de octubre, planteó preguntas sobre cómo se ha entendido el progreso, de qué manera esa idea ha ido tomando eco y por qué son muchos los puntos grises que tiene pensar en el capitalismo como único camino.
“Uno de los mitologemas que ha estructurado el mundo de Occidente es la división entre humanos y mundos, ¿qué argumentos podrían justificar esa separación?, ¿qué mitos dieron paso a esa creencia?, el humano se ha dado la posibilidad de matar todo lo que existe. Entender que esas vidas deberían tener derechos como los que pedimos hoy para nosotros, quizás así se podría evitar una guerra mundial”, aportó Ana María Lozano, moderadora del Coloquio, para introducir la jornada.
Antonio Elizalde Neiva, de Chile, comenzó con una reflexión que título “Aporías de la sustentabilidad capitalista”. “Lo que pretendo demostrar es que los modelos y prácticas desarrollistas actualmente vigentes en el mundo son absolutamente insustentables y ya han entrado en estado de colisión con los límites de nuestro planeta”, precisó el experto, partiendo de Einstein, para luego ampliar con datos que, desde los años 70, hablan de cómo se ha transformado la especie, llegando a apuntar que la población alcanzará cifras desbordadas.
A su vez, desde Ituango, Antioquia, el Movimiento Ríos Vivos estuvo representado por Genaro Graciano, quien planteó cómo la comunidad de este territorio se ha visto afectada por la construcción de la Hidroeléctrica de Ituango – HidroItuango, desde su planeación hasta los problemas que hoy presenta, dejando en el público una discusión sobre cómo las tradiciones ancestrales de allá han ido desapareciendo, o están en el peligro de hacerlo, en cuanto los intereses hegemónicos del desarrollo a través de la generación de energía han cambiado los cauces de un río que fue vida, obra y amor de sus dueños, quienes vivían en sus riveras.
“Es hora de comprender esa actitud engañosa que han tenido las empresas, de decirnos que nosotros al vivir en el campo somos pobres, no lo somos, somos ricos, tenemos agua, tenemos bosque, tenemos aire puro, ¿por qué nos dicen que somos pobres?”, apuntó el representante de Ríos Vivos.
En la sección de preguntas, los asistentes ahondaron en consultar sobre propuestas sostenibles para cambiar los modelos, mientras otros fueron a ideas relacionadas con el papel del arte en la transformación de esos ideales.